NORMAS DE CONVIVENCIA 'CHEZ DOUCE'
Vamos a ver, don Náufrago, usted está aquí o está fuera, porque yo no me aclaro. Viene aquí, a mi casa, se refugia cuatro días y si te he visto no me acuerdo, o me acuerdo poco. La próxima vez que se 'retire' avíseme con tiempo, dígame más o menos cuáles son sus planes, porque yo tengo que hacer los míos. Yo soy una perrita , muy ama de mi casa, y me gusta el orden, la previsión, organizar lo que va a ser mi vida. Si usted es bohemio, culo inquieto, imprevisible, me parece muy bien, es usted muy suyo, pero si se decide a vivir , aunque sea por unos días en casa ajena, debe atenerse a sus normas .
Su presencia en mi casa, que me es muy grata, necesita de algunas referencias para que nos sea grata a los dos. Debe saber que usted come, usa habitación con derecho a cama y baño, utiliza elementos y aposentos de esta casa. De todo eso, una servidora tiene que ocuparse: comprar cosas que le gusten y no arruinen a su estómago maltrecho, por cierto,¿ qué comería usted ayer, que en cuanto ha abandonado mi casa ha empezado a tener desarreglos?. Deberá reconocer que como las comidas que yo le preparo no hay nada. Hay que ver lo majo y reluciente que yo lo tenía y no verlo como está ahora, que tiene la cara ' toa compungía'.
Con todo esto, don Náufrago, no quiero ahuyentarlo y coartarle la libertad de entrar y salir cuando le plazca, venir o irse cuando usted guste. Sólo quiere que se porte como un perro, sí como lo oye: 'como un perro', que sabemos respetar a nuestros amos y no dejarlos tirados, como algunos de ellos hacen con nosotros. ¿Enterado?
- Nada que objetar, doña Douce. He escuchado atentamente sus 'observaciones' y procuraré ser un buen visitante. Reconozca al menos que nos entendemos como una buena pareja de hecho.
- Sobre nuestro 'status' civil hablaremos otro día si no tiene inconveniente. Buenas noches
- Que sean buenas y apacibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario