Douce, antes de lo que voy a contar, voy a darte una noticia. Hoy ha llegado Dandy, tu prima, y se ha dado cuenta de que había algo extraño. Ha mirado toda la casa y se ha dado cuenta que no estabas. No vamos hablar más de eso ya sabes por qué.
Vamos a cambiar de partitura. Hace unos días en uno de esos papeles que ojeo y hojeo me encontré unas imágenes que me revolucionaron un poco las tripas (digamos sentimientos). Brevemente, porque el tema no me gusta nada...
- Pero empieza de una vez, que siempre te enredas. Venga.
Al trapo, ví primero la página y el título: "La fiebre de tunear a los perros". Ya sólo leer 'fiebre' y 'tunear', referido a los perros sentí lo que ya te he dicho. Junto al texto aparecía un 'Noséqué' porque para mí al pobre can le habían hecho una perrería. Mira era éste:
En un recuadro decía:
"Este caniche quedó entre los primeros
puestos en el concurso de belleza canina
en el que participaba"
No terminaba ahí la 'perrada". En la franja de introducción se veían esta 'sabiduría' y 'buen gusto'.
Si te digo la verdad no puedo decir algo coherente. Sólo que se me atragantaron estas letras que no frases:
- "Llevan a los dueños de los perros a customizar hasta el extremos a sus mascotas..."
- "Los premios.... belleza de caninos... pueden alcanzar los 5.000 €"
Y tras estos 'ex - abruptos', otros pobres animales 'tuneados':
Pensé en ti mil veces, necesitaba verte sin tunear como tu eres: tumbada en la hierba, jugando con ek gato Calcetines, paseando con otra amiga, con un gorro de Papa Noël de alguna de la casa, mirando a las palomas, haciendo migas con Tina, de patas en la mesa, mirando al mar... Eso no tiene ningún precio.
2 comentarios:
Memos supinos y aprovechados los hay en cantidades industriales.
Los ha habido siempre y me temo que eso no va a cambiar.
No sólo esos 'memos supinos', esas cantidades, no cambian, lo más triste es que además de no cambiar duplicarán su memez supina.
Fresca noche...
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